Tú, fuiste la víctima.
Déjame decirte: ¡Y una mierda!
Esa manera tuya, tan sutil, de enfervorizar tu cabeza lo antes posible llamando a gritos a la serotonina, como si de una droga se tratase, me angustia.
Ser realmente feliz; que no "
Solo eres una cobarde. Sí, una cobarde de mierda.
- Por intentar sucumbir tus miedos y prejuicios a base de autoengaño.
- Por aferrarte al primer clavo ardiendo capaz de ensalzar solo tus virtudes sin mencionar tus defectos.
- Por volver a cometer los errores del pasado sin importarte el daño a terceros.
- Por no querer afrontar la realidad, y refugiarte en un surrealismo adyacente causado por el miedo y la desconfianza que te atemora.
Por eso y muchas otras cosas...
...pero, ¿eso qué más te da a ti si como fruto obtienes una sensación de "
Solo te importa el tú, el tú y después... ah sí, el tú. Y que te quieran, que te quieran mucho. Que te amen y que te digan cosas bonitas.
Es lo único a lo que le das importancia. Te da igual quién.
Hoy es
Seguiré sin encajar que digas que me sigues amando, que me quieres, que te importo y que te sigo gustando, porque no te creo. No te creo ni te creeré más. Porque es surrealista que lo sientas, si a su vez, sientes o quieres sentir lo mismo por
Tú no sabes ni sabrás lo que es pensar un tiempo en los motivos, en los "peros y porqués" de todo, porque no sabes.
Es más sencillo buscar a alguien que te prometa cuanto antes el mismo cielo al que aspirabas, ¿verdad?
Deja de intentar hacerme daño a base de rencor, porque lo único que consigues es engañarte a ti y no a mí.
Eso sí, dueles. Y no por eso. Pero las palabras duelen aunque sepa de sobras que no son del todo ciertas...
...¡ah!
y aprende a querer de verdad, anda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario