viernes, 21 de noviembre de 2014

Eres tan inocente como valiente...

Es toda tuya, yo no la necesito.
No necesito; ni quiero, a alguien capaz de llamar amor a otra persona en tan poco tiempo. Que afirmaba estar loca por uno y ahora dice estarlo por otro. Que dejé llorando entre lágrimas y "te amo" hace menos de un mes y ahora "ama" al que aguantó sus penas.
No necesito a alguien inmersa en falsedad y autoengaño para salir de un bache. Que es capaz de, en dos semanas, ver la vida totalmente de manera opuesta. Nadie es capaz. 

A alguien que tiene el valor de decirme que me ama, que me quiere y no me ha olvidado, y te ha dicho lo mismo a ti a la vez, hasta que yo me he marchado de su vida. Que ha sido tan abyecta de jugar contigo a mis espaldas porque nunca, insisto; nunca, ha tenido el valor de ir de frente.
Por eso te digo que: puedes quedártela. A ella y a todas las cosas que hasta hace tres meses me escribía a mí porque son las mismas.
Para mí ella solo es otra derrota. Supongo que para ti es una victoria, ya que nunca has experimentado como funciona esto del querer y le has arrebatado media vida a otra persona.
Si yo era el que sentía menos (según ella) y estoy así, cómo ella es capaz de, en tan poco tiempo, cambiar rotundamente de opinión?
Tranquilo. Disfrútala, es toda tuya hasta el día que te destroce. Porque serás uno más. Estoy completamente seguro.
No sé si te cansarás de aquí dos meses o dos años, pero la conozco demasiado más que tú y, sé que, o te arrodillas para satisfacerla, o las pasarás canutas.
Con ese modo de ver la vida que tiene ella, de buscar a su propio príncipe azul por todos los rincones.
Te aconsejo que no ceses en "quererla" a su manera, porque tan pronto como te ha venido, se irá.
Está terriblemente loca y no sabes hasta qué punto. Pero, te doy una pista: ella nunca será la mala de la película.
Tú solo eres un juguete más como lo fui yo.
Quiérela. Con el tiempo ya te acordarás de mis palabras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario