desconfiado desde que tengo memoria,
no intentes convencerme de lo contrario,
tan solo de mi dolor estoy haciendo alegoría.
En el barrio no te puedes fiar de nadie,
quien ahora es tu hermano se cogerá el brazo a la primera de cambio.
Cuando no tengas nada nuevo que ofrecerles,
llegará un momento en el que te darás cuenta de que te quedaste manco.
En la calle no puedes mostrar tus cartas,
parecer tonto y quedarte callado observando es más útil que abrir la boca más de la cuenta.
Me debilito si me dejo llevar por otros,
pero quien es inteligente da muestras de ello sin decirlo siempre.
Cuatro años de mi vida invertidos en una puta,
pero hoy eso no es más que historia,
me salí de líneas rectas forjándome una trayectoria.
Me volví un loco,
amante de lo que quise huir,
pues las putas que ahora me rodean no se diferencian en nada a la que dejé con aquel tonto.
Sátiro y golfo aunque me joda serlo,
aprendí que hasta la más tonta puede hacerte la trece una noche si te relajas.
Soy equilátero como un puto triángulo,
noctámbulo por decreto me redimo de lo que sea,
no me salen los cálculos.
Soy nocivo para quien me escucha,
quien está dispuesto a entenderme quedará loco cuando se marche.
Situaciones a diario a las que soy reacio,
ni si quiera una piba puede hacer que mi cerebro amaine.
Cuando estés harto piensa en lo que tienes en casa,
hay personas que no pueden; siéntete afortunado.
Cada vez que salgo a la calle me hago el loco,
hablo de alguna zorra de vez en cuando para disimular que estoy roto.
En mi rostro las ojeras de un taciturno sonámbulo,
ven a compartirlas; no te lo aconsejo.
Tengo líos mentales y una piba a lo lejos que me sorprende,
deja de comerte el coco; no lograrías entenderlo.
Solo hablo de amor porque no sé nada de la vida,
cicatrices ensombrecen mis memorias para llegar a ser alguien.
Cuando estés solo piensa que no lo estás tanto,
pues cuando uno está solo siempre le hace compañía el llanto.
No digo que llores superficialmente; no lo comprendes,
el alma rompe cuando le das vueltas a lo que ya no tienes.
Me alejo de todo,
la gente no me convence,
hoy en día lo que más destaca se escapa de mi criterio.
El panorama es una puta mierda,
inadaptado y orgulloso,
me rodeo de cuatro,
antes eso que me la chupen a la larga quienes apuñalan a mis espaldas.
Os quiero muertos,
no soy mejor que nadie,
o tú o yo,
no hay otra.
Ven a abrazarme,
no lo necesito.
